Este nuevo año va hacer mucho frío y no solamente en invierno, lo hará todo el año. Las perspectivas sobre el sector de la construcción según el informe de Euroconstruc, no son nada buenas. Se prepara una ley para la rehabilitación, pero si no fluye el dinero, nadie va a realizar obras. No se consigue vender pisos, ya que los bancos no se fían de muchas parejas jóvenes y no les conceden la hipoteca. No se generan nuevas empresas que necesiten nuevas oficinas y las existentes no quieren modificar nada si les va a costar dinero. Y el sector cultural está en caída libre, auditorios y teatros vacíos.

Cada vez más veo a compañeros acústicos que hacen las maletas y se van a Inglaterra, EE.UU, Dinamarca, etc, aprovechan para estudiar en prestigiosas universidades o para buscar trabajo.

Aquí, siempre se necesitará de los servicios de un consultor acústico, pero cada día se van reduciendo. Es lo malo de la poca inversión que hay actualmente. Pero todavía hay muchos espacios con una acústica deplorable, restaurantes insoportables y gente que soporta mucho ruido sin conocer que se puede arreglar. Y también podemos buscar proyectos internacionales. Supone una inmersión en el país donde se quiere trabajar: conocer como se proyecta y que exigencias acústicas requieren los proyectos. Pero es una excelente salida para conseguir algún trabajo y muy bien remunerado.